Por: CONSEJO INDÍGENA MUYSCA CHIBCHA CUNDIBOYACENSE CIMCCB*
“EN EL RESPETO A LA LEY DE ORIGEN, DERECHO MAYOR Y LEY NATURAL, EN EL RESPÉTO A LAS TRADICIONES ANCESTRALES HEREDADAS DE NUESTRAS MAYORAS Y MAYORES; EN EL RESPETO A LOS DUEÑOS DE VIDA, AL PLAN SALVAMENTO DE VIDA, EN RESPETO A LOS DUEÑOS DE CREACIÓN; A LOS DUEÑOS DE LOS PRINCIPIOS UNIVERSALES DE VIDA; AL ORDEN DEL TODO – YBZAQUA; EN EL RESPETO A LOS DERECHOS DE LA HYCHA GUAIA; EN EL RESPETO A LAS INICIATIVAS DEL ALTO GOBIERNO COLOMBIANO POR LA VIDA Y POR LA PAZ”.
Las Autoridades Propias del Consejo Indígena Muysca Chibcha Cundiboyacense CIMCCB y de los Cabildos Indígenas de la etnia Muysca Chibcha, por las facultades otorgadas por nuestras comunidades, la cultura ancestral, la tradición, la historia propia; las normas del derecho de fuero indígena, la de los Estados; y sin detrimento a los derechos fundamentales de libertad de: pensamiento, expresión, conciencia, creencias y cultos, de desarrollo de la personalidad, y diversidad cultural, entre otras; en autonomía y libres determinación de los pueblos,:
MANIFESTAMOS
Que lo trascendental de la vida ancestral, es reconocer una vida espiritual de la cosmovivencia desde un DERECHO MAYOR, cuya fuente de vida es la LEY DE ORIGEN UNIVERSAL, escrita en LEY NATURAL y plasmada en el Plan Integral de Vida de las etnias indígenas; no obedece a supersticiones; ni a plataformas religiosas ni a prácticas de religiosidad, ajenas a los territorios sagrados.
Que, Los diálogos interculturales y pluriculturales son para compartir un bien común; o para cumplir el cuidado de un bien común natural, en lo que respecta a las iniciativas COP-16, DE DEBE CONVERGER URGENTEMENTE RECONOCIENDO LA ESPECIE, LLAMADA HUMANIDAD CON MUCHOS MUNDOS, PERO UNA SOLA MADRE. E ahí el Gran Acuerdo Integral e Intergeneracional propuesto por las naciones nativas, desde el Consejo Indígena CIMCCB del Pueblo Nación Muysca Chibcha. Trascendental para las moradas de vida, para armonizar, nos sustraemos en las cosmovivencia de los pueblos ancestrales, la naturaleza y en los viajes de los movimientos de las estrellas o los calendarios cósmicos naturales, en el cuidado en los presentes tiempos y cambios reales espirituales para transformar las conciencias de humanidad.
Como autoridades propias, participativas, legítimas y representativas del de las distintas comunidades de la etnia Muysca Chibcha del altiplano Cundiboyacense que hacen parte del Consejo Indígena Muysca Chibcha Cundiboyacense C.I.M.C.C.B. en el derecho de la autonomía y libre determinación de los pueblos que nos asiste y en el desconocimiento de su presencia por los gobiernos y paradójicamente en las últimas décadas en un marco de garantías Constitucionales y de tratados internacionales como la Convención 169 de 1989 donde emergen apertura de derechos especialmente para una de las etnias más maltratadas ubicadas en el centro del país desde la llegada del invasor europeo (1537 – 1991) nos sentimos extranjeros en nuestros propios territorios y marginados como resultado del reduccionismo cultural y territorial, situación etno histórica que presenta dicotomías entre la negación y la garantía de derechos.
Esta invisibilidad se acentúa más cuando en la lógica de los estados capitalistas pregonan las libertades que se vuelven complejidades restringidas. Los descendientes de la etnia Muysca Chibcha desde la conquista hemos sido sometidos a desplazamientos sistemáticos, desarraigos violentos y confinación a resguardos en la colonia negando el acceso a sus territorios sagrados; igualmente durante la violencia de los dos últimos siglos los sistemas republicanos de la educación en manos del clero y el surgimiento de nuevos terratenientes configura con las primeras reformas agrarias el reduccionismos ancestral de nuestras gentes al estatus de campesino como sujeto económico y productivo sin arraigo cultural, como efecto de las políticas de gobiernos demostrándose dicho reduccionismo desde el poder del estado bajo el cumplimiento de la ley 89 de 1890 como lo expresaba de dicha ley: “por la cual se determina la manera como deben ser gobernados los salvajes que se reduzcan a la vida civilizada”.
Entiéndase por vida civilizada el dejar de ser nativo a través de la educación clerical y abandono de los campos, desestructurando los resguardos de la etnia desde 1823 hasta 1957, situación histórica mediada por violencias políticas generando nuevos desplazamientos hacia las urbes a tal punto que hoy más del 45% del censo de Distrito Capital son de arraigo Cundiboyacense colocando en evidencia aquel fenómeno demográfico frente a la ocupación de los territorios conocido CIUDAD-REGION, des configurando nuestros territorios por naturaleza colectivos integrales, en microfundíos resultado de la expoliación y expropiación de los territorios indígenas; gran parte de los migrantes en la violencia de los años 40 y 50 del siglo pasado como descendientes de nuestra etnia construyeron el desarrollo de lo que hoy es el Distrito Capital y otra parte que no resistían hacen parte de barriadas de invasión fueron a parar al Sumapaz donde se gesta para Colombia, de una parte, una resistencia agraria como origen de las organizaciones campesinas del país y de otra, la insurgencia ideologizada como respuesta a las injusticias de los regímenes políticos del momento encarnados en familias de terratenientes.
En este contexto hemos de concluir que el devenir de la historia de la etnia ha hecho parte de la construcción del país y ha sido víctima directa del centralismo político y económico a tal punto que actualmente el territorio de los hijos del agua los Muysca Chibcha soportan la carga de migraciones de todo el país en el altiplano Cundiboyacense hasta una 68% de la población colombiana, agudizada especialmente por el conflicto armado a tal punto que en la actualidad coexisten 91 etnias del país de las 115 y es a nuestra etnia que por derecho de fuero indígena territorial corresponde ser priorizada en las políticas públicas étnicas.
Desde el año 2000 se inician rutas fallidas frente a la atención de las etnias indígenas migrantes sin tenerse en cuenta entre otras la resistencia en nuestra historia, desplazamientos internos en la configuración del fenómeno Ciudad- Región, es decir las relaciones permanentes entre los anclajes de los microfundios y los citadinos de lo urbano en vínculos de linaje, pasando desapercibido e ignorados en la discursiva histórica como un pueblo inexistente; discurso que hizo carrera en los claustros educativos negando la existencia de nuestros abuelos y abuelas haciendo ver el surgimiento de los estados a partir de un pasado invisibilizado nativo americano.es en el año2005 donde se registran 5 Cabildos en contexto de Ciudad y sin garantía de regresar a sus territorios de origen desconociendo la existencia de otros grupos étnicos politizándose la garantía de derechos e incumpliendo los acuerdos para la consolidación de la asociación de Cabildos Indígenas del Distrito ASCAI bajo el gobierno del Alcalde Luis Eduardo Garzón, quien manifestara “ en esta organización deben caber todas las etnias tanto registradas y no registradas ante el ministerio del interior”.
Este hecho que no se cumplió por los responsables mediáticos del momento de dicha asociación; de otra parte el 25 de septiembre del mismo año se hace entrega de un documento por líderes de nuestra etnia de la Consejería Indígena Cundiboyacense al Presidente de la Republica en el que se le recuerda como mandatario la obligación constitucional de reconocer la Nación Muysca Chibcha más allá de los protocolos de registro de Cabildos Indígenas como respuesta a los desagravios a la Madre tierra en los territorios que nos corresponde en el altiplano andino Cundiboyacense, petición no resuelta a nuestra solicitud de reconocimiento propio como un pueblo nación, generando persecuciones y amenazas en algunos de sus líderes y excluyendo a nuestras comunidades indígenas legítimas, representativas y participativas; es por ello que los Consejos Indígenas Regionales de la etnia ven la importancia de intervenir en lo que corresponde como autoridades territoriales al tenor de los Artículos 329 y 330 de la C.P C frente a la inseguridad jurídica por la ausencia de la ley estatutaria del ordenamiento territorial entorno a la unidad representativa del CONSEJO INDIGENA MUYSCA CHIBCHA CUNDIBOYACENSE CIMCCB como ente de gobierno propio de carácter especial autónomo y que no se ha tenido en cuenta en su carácter legitimo independientemente de la “situación jurídica” en que se encuentran nuestras comunidades tomando como referentes consultivos a los cinco cabildos registrados de la etnia Suba, Bosa, Chía, Cota y Sesquile desconociéndose la existencia de las demás comunidades del altiplano andino Cundiboyacense y del Distrito Capital representadas por el CIMCCB.
En la implementación de la política pública del Distrito no se ha tenido en cuenta a las autoridades propias territoriales del consejo indígena como custodios de la tradición de la ley de origen, derecho mayor y ley natural heredados por nuestros mayores.
En la actualidad nuestras comunidades se configuran en procesos de recomposición étnica y revitalización cultural desarraigados de sus territorios propios tanto de origen como en la misma Ciudad en crecimiento que invade la ruralidad afectando con su carga los bienes naturales vitales como el agua afectando nuestra identidad cultural en la visión de relación con el territorio en el que se ha superpuesto la jurisdicción ordinaria, fraccionando políticamente nuestra intervención integral en el territorio y afectando de sobremanera la participación de los consejos indígenas territoriales quienes sostenemos el territorio como un todo y no como localidades ya que el ordenamiento natural rebasa cualquier frontera administrativa, es por ello que el ENFOQUE DIFERENCIAL DEBE PARTIR DE LA LEY DE ORIGEN Y NO EXCLUSIVAMENTE DE CONDICIONES SOCIOCULTURALES, es decir que dicho enfoque debe corresponder simultáneamente con un enfoque territorial.
Es por eso que como estrategia a esta disfuncionalidad emergen apropiación de espacios autónomos por parte de nuestras comunidades y autoridades propias en distintas partes del territorio independientemente del lugar en que se habita, y se ha venido desarrollando desde la marginalidad institucional de reconocimiento diversas actividades en acuerdo con nuestros planes integrales de vida PIV caracterizados especialmente por espacios de organización comunitaria autónomos tanto local como regionalmente, dentro y fuera del Distrito que recogen las áreas de influencia de acuerdo a nuestras tradiciones de distintos sitios sagrados en el altiplano andino Cundiboyacense y como Gobiernos autónomos apropiamos el territorio a través de prácticas de resistencias agroecológica, pedagógicas y ambientales en la defensa y salvaguarda de nuestra identidad cultural, haciendo presencia en espacios vitales y de participación colectiva autónoma.
Es por ello que nuestros planes integrales de vida deben incorporarse en los Planes de Desarrollo Administrativos.
El COSEJO INDIGENA MUYSCA CHIBCHA CUNDIBOYACENSE es la respuesta de integración de los territorios que desde su vocación natural; integra ecosistemas y biodiversidades que por sí misma le hacen autónomo que desde la visión de la ley de origen y como órgano consultivo interlocuta con los nuevos ordenamientos territoriales expansivos como el caso de la RAPE y la expansión del área metropolitana; salvaguardando los territorios, la identidad cultural y la tradición ancestral de las comunidades en coherencia de la visión de la territorialidad sostenible para la vida misma.
En consecuencia la importancia que al interior de la Constitución los Consejos se vigorizan en su historia milenaria como gobiernos propios ancestrales vigentes y que deben ser tenidos en cuenta en los espacios de participación de los planes de desarrollo a diferencia de los Cabildos que son entes administrativos de carácter especial que representan a las comunidades como ejecutores de las decisiones y deliberaciones de las mismas, demostrando con ello la emergencia epistemológica de gobernanza sin demeritar el accionar de los Cabildos Indígenas ya que estos se obedecen en específico a la jurisdicción ordinaria hegemónica del eurocentrismo exacerbado del derroche y de una sociedad de la basura que piensa como rico y vive como pobre.
CABILDOS INDÍGENAS MUYSCA CHIBCHA
CONSEJO INDÍGENA MUYSCA CHIBCHA CUNDIBOYACENSE CIMCCB
CIMMUA Regional Bogotá D.C.
CIMCC Regional Cundinamarca
CIMCB Regional Boyacá
COMUNIDADES INDÍGENAS
PUEBLO NACIÓN MUYSCA CHIBCHA
cabildomayormuiscachibcha@gmail.com
consejoindigena.cimccb@gmail.com
*Autores:
Chihiza Kuhupkwa Hykakye
Samuel Acevedo Murillo
Consejero CIMCCB
Xieguasinza Ingativa Neusa
Rodrigo Niño Rocha
Consejero CIMCCB
Fotos: Xieguasinza Ingativa Neusa